Morena de manos poseedoras del sentimiento cálido, dispone su mirada, sus sabores, sus sueños, sus sentidos; con los que plasma una de sus epifanías más transparentes, con lluvia de mociones impecables.
¿Dónde se halla? vive en un desierto inundado de rostros ambiciosos que buscan en ella su propia suerte.
Nada la distrae, su piel canela desfila oculta bajo una capa de seda. Su mirada negra conquista la esbelta noche.
Sus sueños se revelan en un profundo corazón infinito que aguarda confiado en su regreso. Crisantemos, rosas, claveles, orquídeas y calas revisten su camino, palpitando su destello.
Morena, dueña de su entorno, de su amor eterno, esculpe letras enamoradas de su existencia, cada una baila al son de su mirada.
Pálidas luces de la luna proyectan sus pensamientos más ocultos, cuyos testigos son ella y su compañero de musa.
Una gota de lágrima cae en su esperanza, danzando una delicada pincelada de poesía. Cautivan, atrapan, ilusionan las almas hipnotizadas que en ella se clavaron
¿Dónde se halla? vive en un desierto inundado de rostros ambiciosos que buscan en ella su propia suerte.
Nada la distrae, su piel canela desfila oculta bajo una capa de seda. Su mirada negra conquista la esbelta noche.
Sus sueños se revelan en un profundo corazón infinito que aguarda confiado en su regreso. Crisantemos, rosas, claveles, orquídeas y calas revisten su camino, palpitando su destello.
Morena, dueña de su entorno, de su amor eterno, esculpe letras enamoradas de su existencia, cada una baila al son de su mirada.
Pálidas luces de la luna proyectan sus pensamientos más ocultos, cuyos testigos son ella y su compañero de musa.
Una gota de lágrima cae en su esperanza, danzando una delicada pincelada de poesía. Cautivan, atrapan, ilusionan las almas hipnotizadas que en ella se clavaron
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